En la navegación basada en la performance, más conocida por su sigla en inglés PBN (Performance-Based Navigation) las trayectorias están definidas por medio de señales satelitales. En los últimos tiempos, PBN demostró ofrecer numerosas ventajas para el desarrollo de la navegación aérea, las cuales hicieron que se diera prioridad a la implantación de esta tecnología.
La llegada del PBN significó beneficios para la Seguridad Operacional, al facilitarse la armonización y homogeneización de los procedimientos de navegación en zonas de aeropuerto y en ruta. En un futuro cercano, esto valdrá también para todo el ámbito de la Terminal Aérea Baires.
A la fecha, y en cumplimiento de objetivos trazados por la Organización de la Aviación Civil Internacional (OACI), EANA lleva diseñadas e implementadas cartas instrumentales PBN en 29 aeropuertos de todo el país, y estima alcanzar los 36 –con 85% de las cabeceras comerciales cubiertas- para fines de 2019. Desde entonces, los PBN aportan las siguientes ventajas:
- Gran precisión en los circuitos de entradas y salidas a los aeródromos
- Optimización de las trayectorias y rutas, con reducción de las distancias voladas
- Menor consumo de combustible
- Mayor cuidado ambiental gracias a menores emisiones
- Mayor integridad en la navegación, ya que las operaciones pueden continuar aun con la salida de servicio de los sistemas terrestre.
El PBN sirve además para disminuir y mitigar los riesgos de impacto en vuelo controlado, un tipo de colisión en el cual una aeronave vuela de manera inadvertida contra el terreno o un obstáculo.
En este tipo de colisiones, los pilotos no suelen ser conscientes del peligro inminente. En estos casos el PBN adquiere gran importancia como factor de mitigación. Por otra parte, el PBN incorpora funciones y sistemas de navegación autónoma. Brinda precisión en las aproximaciones, a la vez que las hace más directas y a ello le suma el guiado vertical.
La capacidad de ejecutar descensos continuos, sin interrupciones, la reducción en la distancia entre una aeronave y la que le precede en la misma trayectoria, y la inclusión -en el diseño de las trayectorias- de la separación de los mínimos verticales de cruce simplifican la gestión del tránsito y la labor de los controladores aéreos. Esto significa un beneficio directo en Seguridad Operacional, y contribuye a reducir el consumo de combustible y las emisiones.
El desarrollo sostenido de los sistemas de aviónica –la electrónica de navegación y comunicaciones a bordo de las aeronaves- ha contribuido de los estándares de Seguridad Operacional de la Organización de la Aviación Civil Internacional (OACI). De esta manera, EANA ofrece a los usuarios Seguridad y Confiabilidad.