Porque estamos convencidos de que las debilidades y las insuficiencias del sistema se resuelven cerca de cada compañera y compañero, es que este último fin de semana visitamos los aeropuertos de Rosario, Sauce Viejo, Paraná y Gualeyguachú, transmitiendo a cada trabajadora y trabajador, lo que verdaderamente significan para la jerarquización del sistema que nos proponemos. Porque ningún desarrollo puede ser exitoso sin justicia social, queremos reconstruir los vínculos esenciales entre cada uno de los que integramos EANA.
Estamos en un momento trascendental en la historia de la Navegación Aérea Argentina, por cuanto nuestros esfuerzos estarán dirigidos en hacer una planificación fuerte, responsable, comprometida y viable, abordando todos y cada uno de los temas que necesitan ser atendidos urgentemente, pero siempre abrazados a la gente que durante todo este tiempo fueron los que sostuvieron al sistema.
Sabemos que estamos transitando un sendero estrecho, complejo, desafiante, donde no hay lugar para egoísmos personales ni pujas innecesarias. Estamos convencidos que obrando de buena fe seremos capaces de identificar las prioridades urgentes para que al compartirlas, podamos encontrar los mecanismos que nos ayuden con la mejor solución a cada tema.
Nuestro sistema de navegación aérea debe estar federalizado y eso debe visualizarse en todas y cada una de nuestras acciones, y así con hechos concretos sumar al Proyecto Nacional de Desarrollo, porque nuestra actividad es neurálgica para que ello sea posible.
Estamos en pleno análisis para llegar a cada dependencia de navegación aérea de nuestro país, con un esquema de gestión federal, integrando a todos los trabajadores.